Memorial soviético de Treptower Park

La batalla de Berlin fue una de las más duras de la guerra en Europa y una de las más esperadas por el ejército soviético. Tras cuatro años de larga lucha, por fin llegaban a la capital de su enemigo. La batalla marcaba no sólo el final de la guerra en Europa, que terminaría apenas unos días después de la rendición de las últimas tropas de las SS en la capital del Reich, sino la supremacía del oso ruso en toda la Europa del Este.

Desde Stalingrado en 1943 hasta la victoria final del 9 de Mayo en Berlín, el ejército rojo había ido encadenando una serie de grandes operaciones y de grandes victorias. Esta larga lucha lo había convertido en una de las mejores máquinas de guerra terrestre de la historia.

Para conmemorar el inicio y el final de la victoria, la Unión Soviética levantó sus dos mayores memoriales de guerra: el de Stalingrado y el de Berlín en Treptower Park

Este memorial no es ni mucho menos el único que los soviéticos erigieron en la capital alemana, pero si es el más grande y es también donde los veteranos de las antiguas repúblicas soviéticas celebran cada año la victoria en la gran guerra patriótica.

Cómo llegar al Memorial soviético de Treptower Park

Para acceder al parque de Treptower Park se debe tomar el S-bahn hasta la parada del mismo nombre. La estación se encuentra muy bien comunicada al ser una de las paradas del Ringbahn, la línea circular que recorre el centro de la ciudad. Las líneas que paran allí son la S41, S42, S8, S85, S9. Puedes consultar la red completa de transportes AQUÍ.

Horario de apertura

El monumento es accesible durante todo el día ya que se trata de un parque. No obstante se desaconseja su acceso tras la caída del sol debido a que no se encuentra iluminado.

Visitar el Memorial soviético de Treptower Park

El monumento soviético de Treptower Park fue levantado entre 1946 y 1949 para conmemorar el final de la guerra en Europa. Es un homenaje al sacrificio de los soldados soviéticos y de las 15 repúblicas que llevaron a la derrota del nazismo.

Con el objetivo de dejar clara la total derrota del nazismo y la supremacía del comunismo sobre esta ideología derrotada por las armas, el memorial fue construido utilizando materiales de construcción reciclados de la nueva cancillería del Reich, el impresionante edificio del centro de Berlín donde Hitler tuvo su oficina desde 1939 y donde se encontraba el bunker donde se suicidó el 30 de abril de 1945.

Nada más entrar por cualquiera de los dos arcos de entrada, se advierte ya la solemnidad del lugar. En la inscripción del arco dice: «Vuestros grandes actos heroicos son inmortales. Vuestra gloria sobrevivirá durante siglos. Vuestra patria os tendrá siempre en el recuerdo»

Una vez pasada la entrada, el visitante recorre un pasillo arbolado hasta la estatua de una mujer que representa la madre patria Rusia, a la cual se ve triste por la pérdida de sus hijos. Desde aquí, se puede girar hacia el interior del monumento.

El visitante tendrá que subir una ligera pendiente, acercándose poco a poco a dos monumentales banderas rojas de piedra, las cuales se encuentran inclinadas en señal de respeto y bajo las que se encuentran dos veteranos soldados con la rodilla hincada en el suelo y la cabeza gacha.

Una vez se llega a ese punto, por fin se puede acceder a una terraza desde donde se contempla el interior del memorial, que cuenta con 5 parterres bajo los cuales se encuentran enterrados 4800 soldados que combatieron en la batalla de Berlín. Tras estos parterres, domina el memorial una colina sobre la cual se colocó una gran estatua de bronce, un hombre con una niña en brazos.

El hombre simboliza al ejército rojo, el cual está sobre una espada que descansa sobre una esvástica rota en el suelo. La niña simboliza a Europa, un ser indefenso que ha sido salvado por la Unión Soviética.

El camino que lleva hasta la estatua está jalonado de 15 sarcófagos de piedra, uno por cada república soviética y donde se pueden ver relieves que narran la conocida por los rusos como la Gran Guerra Patriótica.