El régimen nazi no solo tenía dimensiones políticas, sino también sociales, morales y religiosas. Las intenciones del régimen de Adolf Hitler eran las de instaurar una nueva religión que sustituyera al cristianismo, el cual consideraban de orígenes judíos y por lo tanto, antialemán.
Los encargados de crear esta nueva religión oficial serían los SS, los caballeros de la nueva Alemania. Tratando de encontrar un nexo de unión con un pasado más germánico y por lo tanto, más puro desde el punto de vista nacionalsocialista, multitud de lugares fueron creados o transformados para el nuevo culto oficial.
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La iglesia de San Servatius fue uno de esos lugares. Comenzada a erigir en el siglo X como capilla real, esta impresionante iglesia románica, hoy en día patrimonio de la humanidad de la Unesco, era un perfecto escenario para los rituales de las SS. La elección de este templo como lugar de culto nazi no se realizó sólo por su antigüedad, sino también por la presencia de la tumba del rey de Sajonia Enrique I.
La madrugada del 1 al 2 de julio de 1936 tuvo lugar en la cripta una ceremonia donde el líder de las SS Heinrich Himmler rindió homenaje al rey sajón en la celebración del milenio de su muerte. A partir de ese momento y hasta 1944, cada año se celebraría un ritual similar, donde los nuevos alemanes rendían culto a los antiguos, demostrando el nexo de unión entre el pasado germánico y el presente nazi.
Durante este periodo la iglesia fue desacralizada y convertida en un espacio de uso exclusivo para los miembros de las SS. Todo elemento arquitectónico y decorativo posterior a la época románica fue retirado. También la cruz gamada nazi sustituyó a la cruz cristiana. En abril de 1944 la población de Quedlinburg fue liberada y la iglesia fue retornada a la comunidad de creyentes. Hoy en día la iglesia sigue siendo un templo cristiano.
Visitar la iglesia de San Servatius en Quedlinburg
Los horarios y precios de visita de la abadía de Quedlinburg pueden consultarse en la página oficial de turismo de la ciudad. La mejor manera de llegar a la población es hacerlo en vehículo privado.