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Taller de Otto Weidt

Desde el 9 de noviembre de 1938, la conocida como Noche de los cristales rotos, los judíos alemanes quedaron bajo la custodia directa del régimen nazi. Muchos fueron trasladados a campos de concentración, pero muchos otros se mantuvieron en las ciudades alemanas y sirvieron al esfuerzo de guerra alemán trabajando como mano de obra forzada.

Otto Weidt.
CC BY-SA 3.0Hanay

En 1940, Otto Weidt abrió un taller de cepillos en el centro de Berlín. Debido a su avanzada edad estaba perdiendo la visión, así que tomó conciencia de las dificultades que pasaban las personas con esta discapacidad. Debido a esto, consiguió que el ministerio de armamento alemán le asignara para su taller a varias decenas de judíos invidentes, los cuales de no haber sido por él, habrían sido eliminados rápidamente por su incapacidad para trabajar en un campo de concentración.

Exterior del taller de Otto Weidt en la actualidad.
CC BY 2.0Jean-Pierre Dalbéra

El taller estuvo en marcha hasta 1943, cuando la Gestapo lo cerró definitivamente y trasladó a sus trabajadores a Auschwitz, donde la mayoría fallecieron. Otto Weidt sin embargo consiguió salvar a su secretaria, una mujer llamada Alice Licht, a la cual escondió en su casa hasta el final del conflicto bélico.

Cómo llegar al taller de Otto Weidt

El pequeño taller de Otto Weidt se encuentra en la Rosenthalerstrasse. Para llegar hasta allí debemos dirigirnos a la estación Hackeschermarkt con las líneas S3, S5, S7 o S9 de S-bahn. Para conocer la mejor combinación para llegar puedes consultar el siguiente ENLACE.

Horario de apertura

  • De lunes a domingo – 10:00 a 20:00

Entrada gratuita

Visitar el Taller de Otto Weidt

El antiguo taller de Otto Weidt es hoy en día un pequeño museo donde se cuenta la historia de su dueño y de sus trabajadores. La pequeña exposición se ha situado en los antiguos talleres de cepillos. En las vitrinas de la exposición se pueden ver objetos utilizados en el taller y también objetos personales de los antiguos trabajadores del lugar.

Interior del museo.
CC BY 2.0Jean-Pierre Dalbéra